miércoles, 17 de diciembre de 2008

Lo más importante, querida...

- Lo más importante, querida, es vivir una vida fabulosa. Sin importar cuan larga es. Y dejar algo para el recuerdo, ya me entiendes, algo diferente. De hecho deberías considerar que te estoy haciendo un favor en ése sentido.

Marty limpió cuidadosamente el cuchillo carnicero que había sacado de la mochila y lo levantó para mirar su propia imagen reflejada. Paseó alrededor de la silla en la que había atado a la chica estudiándola como un escultor estudiaría un nuevo bloque de mármol.

- Me gustaría que pensaras de verdad en lo que te estoy diciendo. –levantó la barbilla de la chica con la punta del cuchillo para asegurarse de que le estaba prestando atención- No eres nadie. Nadie en absoluto. Reina de belleza del baile, novia del capitán del equipo y una verdadera puta. Sin embargo en mis manos estás tan llena de posibilidades…

Paseó el cuchillo desde la sien izquierda de la chica hasta la mordaza en la comisura de los labios, dejando una ligera marca en la piel manchada de lágrimas y maquillaje. La chica trató de apartar el rostro, y Marty le propinó un fuerte golpe en la mandíbula con el puño cerrado que estuvo a punto de hacerla caer al suelo. Pronto más lágrimas de desesperación poblaron los ojos de la muchacha, nublando la visión de aquella sonrisa sádica que la mantenía encerrada desde hacía dos días.

- ¿Todavía no te has dado cuenta de que no vas a salir viva de aquí? –gruñó Marty en el oído manchado de sangre de la muchacha- Eres aún más imbécil de lo que pensaba, joder. Te estoy regalando un nombre, portadas de periódicos, horas de televisión… ¡y tú mordiendo mi mano! Ojalá hubieras podido ver en el noticiero a tus amigos enseñando tus fotos y pegando carteles…incluso te he traído uno, mira.

Acercó una mesa de trabajo que estaba junto a la pared y desplegó encima un cartel amarillo con una gran foto de la chica en el centro. “Buscamos a Susan Chambers, desapareció el día 14 de diciembre mientras regresaba a casa desde el instituto. Si la has visto, llama por favor al 555-4712.” La foto era una ampliación de la que aparecía en el anuario del instituto, una de las que más le gustaban a Susan. Pensó en la tarde en la que se la había hecho, horas antes de perder la virginidad en la habitación de Jake. Dios, qué lejos parecían ahora Jake y aquél día…

Marty miraba la foto con aire soñador a su lado. Se agachó, y colocó en la mesa una bolsa de deporte negra. La abrió, y Susan pudo ver todo tipo de herramientas de trabajo, con las que no pudo evitar pensar en lo que iba a hacerle aquél loco. Entonces, Marty sacó del fondo de la bolsa un estuche de madera lleno de rotuladores de colores. Cogió uno rojo, le quitó la capucha con la boca y la escupió al fondo de la sala.

- Quiero que veas lo bien que vas a quedar. Voy a cortar aquí, y también aquí –marcó con el rotulador unas amplias y deformes líneas siguiendo los bordes de la boca de la chica, y otras más bajando desde los ojos hasta el mentón.- Estos no serán muy profundos, lo justo para que se puedan ver de lejos. Los de la boca serán como un guiño, una mueca de felicidad, ya sabes. Además te la voy a coser, la boca, digo, no soporto los gritos y los lloriqueos. Sí, no me mires así, todas me prometen que van a estar calladas y luego no dejan de chillar como cerdas.

Susan empezó a moverse con desesperación tratando de soltarse de la silla, pero los nudos estaban asegurados y le resultó imposible sacar ni siquiera una mano para tratar de escapar. Mientras tanto Marty le contaba que todavía no había decidido si sacarle los ojos al principio o al final, aunque lo más seguro es que lo hiciera al final para que pudiera ir admirando el proceso, decía. Susan intentó dar patadas, bracear, chillar, pero todo era inútil.

- Al final te desangrarás, aunque puede que tengas suerte y mueras antes, todavía no controlo mucho los tiempos. –dijo el chico riendo con ganas, como si acabara de contar un chiste de lo más gracioso. Se acercó y aspiró el olor salado de su mejilla mientras la rozaba con la punta de la lengua, haciendo una mueca de desagrado- Hueles mal. Seguro que te lo has hecho todo encima, qué asco. Vamos a empezar antes de que me hagas vomitar…

Cogió con la boca el cuchillo mientras se ponía un delantal de cocina y volvió a sonreír a la chica mientras la sujetaba del pelo y acercaba el cuchillo a uno de sus bonitos ojos azules.

- ¿Preparada?

- ¡CORTEN! –dijo una voz desde la oscuridad- ¡Genial, fantástico! ¡Dios santo, cómo habéis estado!

El chico se quitó el delantal y ayudó a levantarse a la muchacha mientras el director subía con grandes zancadas por las escaleras del teatro hacia ellos. Ambos se abrazaron riendo emocionados por los aplausos que todos los miembros del reparto les regalaron desde las butacas.

- Maravilloso, chicos, ¡maravilloso!-el señor Rodgers, director de la función, daba saltos a su alrededor y parecía a punto de echar a volar- Habéis captado toda la fuerza de la situación, el dramatismo, la fatalidad… ¡una maravilla!
- Bueno, tengo una compañera fantástica, así es fácil meterse en el papel.-dijo el muchacho un poco avergonzado por los elogios y los aplausos.
- Tú sí que lo has clavado, tío, ¡me has acojonado de verdad! Si llegas a tener un cuchillo de verdad en lugar del de plástico te juro que me levanto y salgo de aquí pitando.

Todos rieron con la broma y empezaron a recoger el equipo. Quedaban sólo dos días para el estreno y no podía fallar nada. Guardaron la silla, la mesa y el resto del atrezzo en los camerinos y se pusieron los abrigos antes de salir a la calle. Se repartieron besos, abrazos y se citaron para el viernes por la tarde, tres horas antes de la función. El protagonista, feliz por el ensayo, caminó hasta el coche con las manos metidas en los bolsillos de la cazadora para resguardarse del frío. Cuando estaba a punto de montarse, el coche que conducía su compañera de escena frenó al lado y bajó la ventanilla.

- Cuídate la garganta y descansa, Ricky. De verdad que has estado genial.
- Lo mismo te digo, Eve, eres toda una estrella.

La chica le sacó la lengua, él hizo ademán de ir a cogerla y se despidieron entre risas. Ricky montó en su coche y siguió al de Eve hasta la salida del aparcamiento, donde giró a la derecha para salir hasta Main Road. Condujo bajo la nevada unos minutos y por fin aparcó en la entrada de una enorme casa de madera roja. No metió el coche en el garaje, como no esperaba a nadie, no molestaría en absoluto.

Entró en la casa, dejó el abrigo en el perchero y pasó silbando por la cocina. Llegó al salón, encendió la tele y subió el volumen de la misma hasta que casi alcanzó el máximo. Volvió a pasar por la cocina, cogiendo el cuchillo carnicero y bajó de dos en dos las escaleras del sótano. Cerró la puerta al entrar y encendió la luz, y entonces se dio cuenta de que su futura obra de arte se había dormido. Caminó en silencio hasta ella, pensando en un enorme trozo de mármol, un trozo de mármol atado y amordazado a una silla esperando a que él le diera forma.

La muchacha se despertó cuando notó el primer pinchazo en la mejilla, y miró a aquél loco con ojos aterrados.

- Lo más importante, querida, es vivir una vida fabulosa.-dijo con una sonrisa- Sin importar cuan larga es.

FIN

7 comentarios:

Anónimo dijo...

Veo que ni el tiempo transcurrido, ni el frío de estos días, medran tu ingenio versado al terror. No cambias, ¿eh? jajaja.
Me gusta, sí. Pero me gusta, no sólo porque esté muy bien -tanto relatado como ideado-, sino porque sale de entre tus dedos; acólitos a los del gran maestro K.
Me hace ilusión poder disponer de tiempo para merodear por vuestras "chozas letriles". Espero hacerlo más amenudo.
Un fuerte abrazo socio!
Y por si se me va de la cabeza: Feliz aniversario, Feliz compleaños y Feliz navidad! (no veas lo feliciano que estoy, no???) :D

Malvi dijo...

Dios Mio de mi vida, es laprimera vez que entro en este blog!!! y volveré, te lo aseguro.

La historia me ha mantenido pendiente todo el rato, y claro, las cosasq ue estaban pasando ya en el final... no me las esperaba!

saludos y felicitaciones, ¡Me ha gustado! y mucho

Rebeca Gonzalo dijo...

¡Joder! Espeluznante. Una historia dentro de otra. Cuando creía salvada a la chica sigo leyendo y me encuentro con la verada que esconde en su sótano. Un giro inesperado y maravilloso. ¡Me has puesto los pelos de punta! ¡Enhorabuena!

Pugliesino dijo...

Que fuerte,a medida que iba leyendo mas odio le iba cogiendo y el corte que das al relato con el corten!! aunque fuera un alivio para el lector éste ya atisba que a la salida él se cargará a la chica pero no sucede así,y uno suspira al verla marchar viva y entonces...!
Aunque acojonaba mas en el ensayo :)
Este día me está resultando lleno de emociones killo,rebienvenido!
Un abrazo!

Jan Lorenzo dijo...

Diossss!! Pero que manera de darle la vuelta y volver a dársela!!

Me asustó el comienzo, tan duro, tan fatal, y con ese CORTEN volví a calmarme e incluso hasta sonreí, pero al ver hacia donde se dirigía de nuevo el relato, de nuevo me puse en tensión...

Yo discrepo con Carlos, a mí me da más miedo su vida real...

Besos!! Y a ver si vengo más a menudo y a ver si me animo a escribir, aunque necesito un buen empuje para ponerme con ello... I need help!! jajajaj...

Jan Lorenzo dijo...

Me debes leerte mi último relato.

;P

alguien dijo...

Interesante empleo del recurso narrativo. Siempre es efectivo ya sea un sueño, una peli o una obra de teatro :)
Y macabro, perverso, estupendo giro final. Se te echaba de menos por aquí